Si está entre los 10 millones de esquiadores y “snow boarders” que llenan las pistas en invierno, lleve consigo su protector solar. Resulta fácil pensar que en un clima frío no existe el riesgo de sufrir quemaduras solares, pero los rayos ultravioletas (UV) del sol realmente pueden ser más perjudiciales en las pistas de esquí que en la playa.
Por cada 1,000 pies de altura sobre el nivel del mar, la exposición ultravioleta aumenta del 8 a 10 por ciento. Un esquiador de complexión “promedio” de piel blanca a 11,000 pies sobre nivel del mar en las montañas de Colorado, se quemará al mediodía después de apenas seis minutos de exposición sin protección, comparados con 14 minutos en Florida. Además, la nieve refleja el casi 80 por ciento de los rayos ultravioleta del sol de modo que los mismos rayos lo dañarán más de una vez.
Para cuidar su piel en la temporada de esquí, ponga en práctica estos consejos:
- Limite el tiempo que esté a pleno sol, especialmente entre las 10 de la mañana y 4 de la tarde.
- Si usted está en las pistas gran parte del día, tome recesos en la sombra para que la piel descanse del sol.
- Beba mucha agua para evitar la deshidratación.
- Use camisas de manga larga y pantalones largos oscuros o de colores brillantes, telas de tejido apretado; que ofrecen una mayor protección.
- La exposición a los rayos UV contribuye a graves trastornos oculares, incluidas las cataratas y la degeneración macular. Para reducir los rayos UV que vienen de arriba y se refleja en el hielo y la nieve, use un sombrero y lentes de sol con protección UV con estructura envolvente o armazones grandes. Estos no sólo protegen sus ojos, sino también sus párpados y el contorno de los ojos.
- Aplique un protector solar con un SPF de 15 o superior en la cara.
- Use un bálsamo de labios con un SPF de 15 o más para protegerse contra el sol y el viento.
- Espárzalo libremente (dos onzas, el tamaño de una pelota de golf) y uniformemente sobre toda la piel expuesta.
- Asegúrese de cubrir las orejas, el contorno de ojos, el cuello, el cuero cabelludo y las manos.
- Vuelva a aplicar como mínimo cada 90 minutos y más seguido después de la sudoración o la exposición al viento y la nieve.